El fibrocemento es un material original utilizado en la forma de listones para revestimiento. Consiste en una combinación de arena, cemento y fibra de madera. Además, tiene más de una propiedad innovadora y ecológica para tu fachada.

1. Está hecho de una forma única

El fibrocemento encontró un resurgimiento en los años ‘90. Está compuesto de arena, cemento y celulosa. Después de su preparación, estos materiales se mezclan en un tanque con agua y aditivos. Esto da como resultado una pasta, que luego se deposita en una cinta transportadora que pasa por debajo de unos rodillos. Se elimina parcialmente el agua y se forma una película semi-rígida. Esta película después se corta en láminas, que se pasan por cabinas de secado para que se endurezcan. Finalmente, se corta en placas y se le da color. El material es rígido (gracias al cemento) y flexible (gracias a las fibras de madera). En otras palabras, innovador.

2. Es muy ecológico

Los revestimientos de fibrocemento utilizan materias primas naturales (ver párrafo anterior) que se producen en forma local. En consecuencia, las placas Cedral no contienen sustancias dañinas para el medioambiente. Las placas también se benefician por el proceso de fabricación de alto rendimiento que no libera ningún agente dañino. Al entregarlos en pallets, es liviano y fácil de transportar a la zona de construcción.

El fibrocemento también se caracteriza por su longevidad, de modos que puedes esperar tener una fachada de por vida. Y esta es una de las 6 razones por las cuales elegir los listones para fachadas Cedral.

3. Es ideal para crear asilación exterior

Elegir una aislación exterior con frecuencia se lo considera algo más sencillo. Hacer lo contrario, es decir, aislar las paredes del interior, con frecuencia da como resultado que la condensación se convierta en un problema, que debe solucionarse aumentando la ventilación. Colocar aislación en los faldones exteriores reduce este problema. Consecuentemente, se necesita una cobertura definitiva para proteger la capa de aislación. Las placas de revestimiento Cedral son ideales porque son fáciles de instalar, duran mucho tiempo y necesitan poco mantenimiento. Este método puede emplearse tanto en construcciones nuevas como en renovaciones.